El sabor de las margaritas

El sabor de las margaritas

Totalmente recomendable, con actores gallegos de mi tierra natal como María Mera.

Desaparecido

Año 2010, cerca de la visita del Papa Benedicto XVI a Santiago. La teniente de la Guardia Civil, Rosa Vargas, una agente novata pero decidida de la división judicial, llega al pueblo gallego de Murias. Investiga la desaparición de la joven Marta Labrada. Los guardias civiles locales —el sargento Alberte, a punto de jubilarse, y el cabo Mauro, su sucesor— no le han dado mucha importancia al caso, ya que Marta traficaba con drogas y marihuana, y creen que probablemente se ha marchado del pueblo. Mauro no la va a echar mucho de menos, pues, casado y con una hija, Ana, no le hacía mucha gracia que frecuentara su casa. Sea como fuere, la obstinada Rosa insiste en sus investigaciones y descubrirá elementos extraños en el caso, llegando incluso a vincular a Marta con la prostitución, con la firme sospecha de que la desaparecida es solo la punta del iceberg de un asesino en serie fetichista que fantasea con tener relaciones sexuales con niñas.

 

 

Una sorprendente serie policíaca rodada íntegramente en Galicia, con productoras locales, que logró un acuerdo de distribución con la televisión regional y Netflix, con una acogida inesperadamente buena. Presenta un formato de thriller al estilo americano, esforzándose por evitar los clichés —algo que no siempre consigue, pero sí la mayoría de las veces— y sabe guardarse varios ases bajo la manga a medida que se desarrolla la historia, para sorprender al espectador, a veces con giros argumentales notables. Se aprovecha del hermético mundo rural y del carácter reservado de los gallegos, por lo que no sorprende que los personajes tengan secretos que ocultar. Y denuncia con razón el sórdido mundo de la explotación sexual de las mujeres y la complicidad de los poderosos en ella.

 

La serie explota con acierto el papel de la protagonista, a quien el espectador acompaña en el singular viaje que constituye su investigación; y las referencias a Dante y a la Divina Comedia, que dan título a los capítulos, o las constantes alusiones al viaje del Papa, son un buen recurso para crear la atmósfera deseada y contribuir a conformar un punto de vista moral sobre los sucesos de este turbio mundo. Además, desarrolla los distintos personajes con la sutileza necesaria, justificando que Ana oculte información durante el interrogatorio de Rosa por temor a disgustar a sus padres, señalando los desacuerdos entre Mauro y su esposa, o introduciendo elementos intrigantes como la autoinculpación de un sospechoso. Ciertamente, contiene elementos morbosos, a veces desagradables, pero el director Miguel Conde, con amplia experiencia en series, sabe mostrar cierta moderación y sutileza, por ejemplo, en el tema del culto satánico. La forma en que se desarrolla el caso tiene sentido, no se deja llevar por los caprichos arbitrarios de otras series que recurren a trucos del oficio, el trío de guionistas —Eligio R. Montero, que ha escrito para muchas series, y los debutantes o casi debutantes Ghaleb Jaber Martinez y Raquel Arias— han hecho bien su tarea.

 

Esta serie también sirve para descubrir a un grupo de actores bastante desconocidos, ya que, con la excepción de Nerea Barros, los demás son desconocidos, y hacen bien su trabajo, especialmente María Mera, que interpreta al personaje principal, y Miquel Insua, el sargento a punto de jubilarse.

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comentario 5
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    Louise Birks
    I might add it to my list. Just finished a series so looking for something else 
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    Nilay Patel
    Will watch
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    Rahi Patel
    Cool 
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    A-A
    Nice
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    Marta Cadalso
    La veré! Gracias